La prevención de enfermedades importadas es una responsabilidad muy gran de las empresas transportistas. Los buques graneleros o los que trasladan carga en cualquier movilidad son vehículos de transporte de muchos insectos y microorganismos a diversos países. Es por eso que la fumigación de bodegas de buques se ha convertido en un proceso esencial para velar por la salud pública.
Entre los bultos que se pueden encontrar en un barco pueden ocultarse todo tipo de pequeños seres vivos. A veces un animal puede ser completamente inofensivo en su entorno natural. Sin embargo, al llegar a un nuevo ecosistema puede llegar a reproducirse incontrolablemente y causar daños enormes. Eso es lo que se trata de evitar con la fumigación de contenedores y granos y de las bodegas.
Las normas internacionales que se establecen para realizar este procedimiento han sido establecidas por las principales organizaciones del transporte marítimo. Tanto la Organización Marítima Internacional (IMO) como la Gafta Trade Assurance Scheme (GAFTA) y la International Maritime Fumigation Organization (IMFO) resaltar la importancia de estos procesos.
De hecho, el potencial destructivo de la introducción de nuevas plagas a través del comercio internacional puede ser peor que cualquier vertido de petróleo. En el exterior de los contenedores es común encontrar insectos polizontes que abordan en sus lugares de origen o en sus paradas.
En realidad, los bichos pueden vivir en casi cualquier rincón de un barco. A veces se encuentran infestaciones en los dormitorios de la tripulación. En otros casos un cargamento pudo traer ocultas algunas larvas y durante el tiempo de viaje llegan a ser insectos adultos que se reproducen. En otras ocasiones son los contenedores los que portan la plaga, aunque parecen inocuos. Es por eso que se deben hacer fumigación en embarcaciones marítimas en casi todas las áreas.
Son los siguientes:
Esta es un procedimiento que garantiza que las mercancías sean inocuas desde el punto de carga hasta el lugar de destino. La ejecución de la fumigación se hace en el lugar de origen y recién pasa a ser desgasificada en el puerto final. Esta es la modalidad puede ser la más indicada en caso que se vayan a atravesar puntos de tránsito en diversos territorios.
Eso resulta necesario, porque las autoridades pueden requerir diversos niveles residuales de fumigante para considerar a la carga segura. En caso que los niveles sean muy bajos, se puede evitar que se descargue la mercadería y podría llegar a perderse.
Este método de eliminación de plagas es uno de los más usados cuando se deben fumigar productos alimenticios a granel. De esta manera, es muy sencillo asegurarse que no queden residuos inertes en contacto con los productos orgánicos.
Se insertar tabletas del plaguicida dentro de mangas de tela. Esos dispositivos van liberando el compuesto lentamente en forma de gas. De esa manera se puede asegurar que no se produzca una infestación de insectos durante todo el tiempo que tome el viaje. Una de las ventajas de recurrir a esta modalidad de fumigación de bodegas de buques es que es más rápido ejecutar la ventilación.
Este procedimiento es necesario para garantizar una correcta distribución del plaguicida entre los productos almacenados. De esa manera, se aprovecha eficientemente el gas fumigante logrando abastecer a grandes volúmenes de mercaderías.
Una vez que el cargamento ha llegado a su lugar de destino, se debe realizar la desactivación de cualquier desecho. Durante la fumigación puede llegar a generarse subproductos que deben ser neutralizados a la llegada en el puerto de destino.
Como ya hemos mencionado, algunos métodos de fumigación en embarcaciones marítimas hacen necesarios que se mantengan compuestos activos durante el viaje. Sin embargo, es necesario que esos gases y demás sustancias, se encuentren contenidas adecuadamente. Las fugas, aunque no sean peligrosas, pueden generar una gran preocupación entre los tripulantes.
Es por eso, que antes de descargar un cargamento, siempre un profesional debe encargarse de eliminar los gases residuales. El personal capacitado debe certificar que el cargamento está libre de fumigantes antes que sea manipulado por los trabajadores del puerto.
Si estás interesado en este tipo de servicio, comunícate con la empresa Ragscorp que cuenta con experiencia en la fumigación de bodegas de buques. Llama a los teléfonos 981075953 / 422 3914 Anexo 25 para solicitar más información o comunícate a través del formulario de contacto para obtener una cotización. ¡Te esperamos!
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